martes, 28 de abril de 2020

Retrato de Osip Brik para la Revista LEF en 1924 de ALEXANDER RODCHENKO (1891 – 1956)

jueves, 23 de abril de 2020


 Con motivo del Día del Libro traigo hoy estas notas de cuando leí “TODO LOS QUE VINO DESPUÉS” novela de GABRIEL URZA, un autor estadounidense de origen vasco.    
Año 2004 en Muriga, un tranquilo pueblo del País Vasco con más secretos que habitantes. Han pasado cinco años desde el secuestro y asesinato de un político local del Partido Popular, padre de familia, José Antonio Torres, ocurrido en 1998 y la vida en el pueblo casi ha vuelto a la normalidad. Sin embargo, tras los atentados de Atocha en Madrid, el pueblo se enfrenta a su pasado, porque todo el mundo sabe quién apretó el gatillo en aquella ocasión, pero ¿es el joven que está ahora entre rejas el único culpable?
En “Todo lo que vino después” se ven todas las capas de un crimen en el que han intervenido la historia, el amor y la traición. Narran la historia de tres habitantes del pueblo: la viuda del concejal asesinado, Mariana Zelaia, una mujer atractiva de compleja personalidad que se quedó sola con una niña pequeña; el adolescente radical formado en la kale borroka, Iker Abanzuza, encarcelado por ser el imputado por el crimen y un anciano profesor americano, Joni Garrett, que da clases en el colegio elitista de San Jorge al que asistía Iker y que esconde su propio pasado traumático. Los tres exploran las claves de lo que realmente sucedió y enfrentarse a lo que puedan averiguar de la verdad.
Una novela inspirada en una historia real, es un texto profundo, serio, escrita con un estilo directo, que indaga sobre la violencia y sus razones, si es que las puede haber en algún momento. El escenario de la novela: la historia contemporánea del País Vasco y su turbio clima político que arranca desde la Guerra Civil.
Los personajes pueden leerse en clave simbólica, representando cada uno una visión y una forma de sentir no sólo sobre el País Vasco, sino en general sobre la actitud ante la vida. El desenlace tiene una atractiva faceta intimista.

viernes, 17 de abril de 2020


“ORACION SANGRIENTA EN VALLEKAS”, novela de ALEJANDRO M. GALLO
Coincidiendo con un encuentro mundial de la Teología de la Liberación, un sacerdote es asesinado en Vallecas. La policía detiene, como principal sospechoso, a un poeta argentino amigo y vecino, como el sacerdote asesinado, del inspector Ramalho da Costa, que está dispuesto a todo para demostrar su inocencia. Sus pesquisas le llevarán a intervenir entre facciones rivales dentro de la Iglesia católica.
A ello se añade la idea de un Madrid envuelto en una crisis de inseguridad ciudadana, un homicida que mata a escritores, un demente que secuestra y viola a menores y un justiciero que acaba con todo aquel que haya sido acusado de corrupción.
 El inspector de la Comisaría de Vallecas de Madrid, Trinidad Ramalho da Costa, alias el Trini, boxeador en su juventud, número uno de su promoción, un tipo duro con corazón blando, con métodos no siempre correctos y cercano a las víctimas es creación literaria de Alejandro M. Gallo.
Tras el asesinato del cura quizá se esconde El Vaticano y dos curas gemelos que han sido vistos por el barrio, ¿pero seran ellos los responsables del asesinato?
Una novela de acción que engancha, amena, construida sobre diferentes escenarios, pero con los mismos personajes.
Son importantes los personajes secundarios que acompañan al inspector en sus investigaciones: el Coronel, un abuelo, maqui y Marie una señora mayor francesa que arrastra las ‘r’ y todos los vecinos de la casa donde vive el inspector.

sábado, 11 de abril de 2020


De Antonio Machado
De Campos de Castilla

“La saeta”
¿Quién me presta una escalera,
para subir al madero,
para quitarle los clavos
a Jesús el Nazareno?
¡Oh, la saeta, el cantar
al Cristo de los gitanos,
siempre con sangre en las manos,
siempre por desenclavar!
¡Cantar del pueblo andaluz,
que todas las primaveras
anda pidiendo escaleras para subir a la cruz!
¡Cantar de la tierra mía,
que echa flores
al Jesús de la agonía,
y es la fe de mis mayores!
¡Oh, no eres tú mi cantar!
¡No puedo cantar, ni quiero
a ese Jesús del madero,
sino al que anduvo en el mar!

viernes, 10 de abril de 2020


Notas de cuando lei “El sueño del caimán” de Antonio Soler, novela publicada en 2006.
Un tipo anciano, no sabremos su nombre en todo el libro, atiende la recepción de un hotel en Toronto (Canadá). Es español y una vida difícil le ha llevado allí. Fue traicionado en el terreno político y en el sentimental.  Pasó nueve años en una cárcel en los años del franquismo, por participar en la planificación de un asalto a un polvorín dentro de un grupo de la resistencia de izquierdas, una aventura que no pasó de la planificación. En el hotel aparece un día Luis Bielsa. El tipo le conoce porque formaba parte de aquel grupo, pero en el momento de la verdad desapareció bien porque se asustó o porque era un infiltrado. Pero fue ese Luis Bielsa quien los traicionó y provocó la caída del grupo de activistas políticos que acabaron muertos o encarcelados en la España de 1957. Bielsa no reconoce al recepcionista y se instala en el hotel. Ha viajado a Canadá para asistir a la inauguración de un monumento a los brigadistas canadienses. El recepcionista siente ganas de venganza. Reaparecen los recuerdos de los otros miembros de la banda, los años de la estancia en la cárcel, los de las circunstancias de su detención, el recuerdo de Vera, la mujer a la que amó, el recuerdo de su madre, viuda y casada en segundas nupcias con un hombre de perfil borroso y distante. El autor dedica su texto a generar ese suspense, a recordar el compromiso con la lucha de clases, en dilucidar si la revancha se materializa.
Novela entretenida, reflexiva, muy bien escrita, con un lenguaje muy directo y cuidado y con personajes definidos.
Es una historia de soledad, una reflexión sobre la vida, el desarraigo, los fracasos, las traiciones, los sueños no cumplidos, las convicciones perdidas y el papel de la memoria.

domingo, 5 de abril de 2020


Pronto se abrirán las calles y volveremos a caminar

De Antonio Machado

Proverbios y cantares (XXIX)


Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.

viernes, 3 de abril de 2020



“Felipe IV” de MANOLO VALDÉS.
En 1964 fundó el grupo artístico Equipo Crónica junto con Juan Antonio Toledo y Rafael Solbes en el cual se mantuvo hasta la muerte de Solbes en 1981
A la muerte de Rafael Solbes sigue trabajando en solitario en Valencia durante unos años, hasta que en 1989 viaja a Nueva York donde monta su estudio y sigue experimentando con las nuevas formas de expresión.