lunes, 22 de abril de 2013

MARGARET THATCHER (1925-2013), falleció el pasado 8 de abril. Tenía 87 años.
Líder de los tories desde febrero de 1975 fue primera mujer que encabezó el gobierno en Gran Bretaña el 3 de mayo de 1979 durante 13 años. Ganó las elecciones en 1983 y 1987. Dejó el poder en 1990 y fue sustituida por John Major.
Redujo los impuestos (aunque después los debió aumentar) e igualmente redujo el gasto público, los subsidios y el poder de los sindicatos, cerró empresas públicas y aumentó las privatizaciones. Deterioró los servicios públicos en educación, sanidad y transportes. Resistió con fuerza las huelgas y reivindicaciones sindicales.
Alcanzó gran popularidad al derrotar al Ejército argentino en las Malvinas el 14 de junio de 1982. La guerra había comenzado el 2 de abril de 1982 y en la Guerra de las Malvinas o de las Islas Falkland murieron 649 argentinos y 255 británicos.
La Dama de Hierro, creía en el progreso personal por el esfuerzo y la responsabilidad individual. Defendía como tesis ideológica que el Estado era el problema y no la solución y de ahí que había que desregular la acción del capital y dar la máxima libertad a la iniciativa privada y al mercado.
Con ella cerraron un círculo virtuoso Ronald Reagan en Estados Unidos y el Papa polaco Karol Wojtyla.
La escuché en una ocasión en Bruselas. Fue un largo discurso y concluí pensando que era una mujer inteligente, de fuertes convicciones y con poder de convicción hacia los demás, que ejercía un liderazgo fuerte y que sabía pactar no solo con sus amigos sino que también trataba de alcanzar acuerdos con sus adversarios. Rechazaba la integración política y económica europea, pero no despreciaba los valores que suponía una leal cooperación intergubernamental.

3 comentarios:

adela dijo...

Una mujer que no dejaba indiferente a nadie, querida por muchos y odiada por otros, en especial por los Argentinos, y no olvidemos por muchos de sus compatriotas, véase las revueltas en contra de su funeral.

Félix G. Modroño dijo...

Agradezco tu visita en mi blog y me permito devolvértela. Aunque, a la vista de lo que escribes, pasaré más veces.
Un afectuoso saludo.

Elvira dijo...

Yo también creo en el esfuerzo y la responsabilidad individual, pero le sumo la solidaridad. Me parece básica, imprescindible.