miércoles, 13 de junio de 2012

Leo la novela “EL ULTIMO PACIENTE DEL DOCTOR WILSON” de REYES CALDERÓN.
Como soy un enfermizo lector de novelas negras escritas por autores españoles, de esta autora he leído sus novelas anteriores: “Las lágrimas de Hemingway”, “Los crímenes del número primo” y “Expediente Canaima”.
La protagonista de esta historia vuelve a ser la pelirroja jueza Lola MacHor, que en esta ocasión ocupa el cargo de presidenta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional y que suma a su trabajo la preocupación, con su edad, de un nuevo embarazo. Durante un congreso en Barcelona, recibe en su habitación de hotel un manuscrito en el que un individuo, que se hace llamar Rodrigo, le hace partícipe de su macabro experimento: consiste en cometer una serie de crímenes para poner a prueba su cordura. Lo que podía haber sido una broma de mal gusto se convierte en un juego mortal al descubrir el rastro de una oleada de asesinatos, ejecutados metódicamente en diferentes partes del mundo. Se trata de un asesino que aparentemente solo mata por experimentar.
MacHor cuenta con la ayuda de su marido y del conocido en sus novelas anteriores, el inspector de la Interpol, Iturri, para enfrentarse a uno de los casos más absurdos e intrigantes de su carrera: detener a Rodrigo sin disponer apenas de ninguna pista sobre su identidad.
Reyes Calderón es una escritora poco habitual. Es decana de la facultad de Económicas de la Universidad de Navarra y profesora visitante en La Sorbona y Berkeley.
Como la propia autora dice trata de responder con su novela a la pregunta: ¿Por qué alguien puede matar a otro? Si llevamos la maldad en los genes, si es el ambiente el que nos moldea y nos hace malos, alguien que vive en un ambiente sórdido acaba siendo sórdido o al revés. ¿O hay parte de nuestra decisión voluntaria, el que decide ser malo porque sí?

2 comentarios:

adela dijo...

¿¿Llevas anotadas cuantas novelas de genero negro español has leído??

Escéptico dijo...

He leído a unos setenta autores españoles de novela negra o novela policíaca y al cubano Leonardo Padura. De ellos he leído, en bastantes casos, más de una novela. Haz la cuenta. Tengo varios textos pendientes, alguno de ellos de autores nuevos que no he leido anteriormente.