Una de mis últimas lecturas ha sido “EL HERMANO PEQUEÑO”, la quinta novela de J. M. GUELBENZU protagonizada por la juez Mariana de Marco.

La novela se inicia con el descubrimiento de un cadáver, que presenta una siniestra singularidad: tiene las manos cortadas y éstas no aparecen cerca del cuerpo, que resulta ser el de una ex modelo erótica ¿Por qué aparece el cadáver de una ex modelo erótica con las manos cortadas? ¿Para evitar su identificación? La gente del lugar la reconoce y sabe de su vida anodina en esos momentos, así que no puede ser esa la causa. La juez Mariana de Marco, mujer culta e inteligente, abogada de éxito reconvertida en juez de instrucción tras un divorcio complicado, no está pasando por su mejor momento. Ella será la encargada de la instrucción del caso y no acaba de entender qué puede haber motivado el crimen. ¿Es un crimen pasional, un ajuste de cuentas o el resultado de una mente enferma?

Al tiempo que lucha por mantener su integridad ante algunos de los poderes fácticos de la ciudad donde vive, De Marco tratará de llevar a buen puerto la investigación, entre el desasosiego por lo morboso de las circunstancias del crimen y la intrigante aparición de su hermano pequeño, un personaje algo turbio al que le había perdido la pista, que le traerá claves del pasado, afectará al proceso y a la investigación y despejará algunas incógnitas del futuro.

La novela incluye una nómina de personajes y un ambiente de ciudad de provincias cerrado y corrupto muy bien descrito, en el que pululan los sujetos que se enriquecen con el poder, la corrupción y el miedo.

La juez Mariana de Marco protagoniza esta serie policíaca de José María Guelbenzu: “No acosen al asesino” fue la primera y continuó con “La muerte viene de lejos”, “El cadáver arrepentido” y “Un asesinato piadoso” y que llega ahora a su quinta entrega con “El hermano pequeño”.