lunes, 27 de mayo de 2024
miércoles, 22 de mayo de 2024
Notas después de leer “AZUCRE” novela de
BIBIANA CANDIA BECERRA
La novela nos sitúa en Galicia en 1853,
con un invierno lluvioso que ha destrozado las cosechas y con una epidemia de
cólera que hace estragos entre la población.
Orestes Veiga, el Tísico, el Rañeta y
Trasdelrío, el Comido, Tomás el de Coruña y muchos otros jóvenes que anhelan un
futuro mejor para ellos y sus familias deciden abandonar sus hogares y partir
rumbo a Cuba para ganarse la vida en las plantaciones de caña de azúcar. La
única salida para los jóvenes de Azucre parece ser viajar al nuevo mundo para conquistar
unas condiciones laborales de las que carecen en su tierra natal. El viaje les
tiene reservado un calvario que jamás habrían sido capaces de imaginar. Azucre
es el relato novelado de una historia de mil setecientos jóvenes que viajaron a
Cuba para trabajar y terminaron vendidos como esclavos por obra de Urbano
Feijóo de Sotomayor, un gallego afincado en la isla que, aprovechando la
situación de necesidad de sus compatriotas, promovió una campaña de
colonización blanca y sustitución de la mano de obra llevada desde África. De
esa forma se reducirán los costes laborales de la mano de obra de los
jornaleros negros sustituyéndolos por compatriotas en sus empresas azucareras: serán
los nuevos esclavos.
Se conservan las listas de las personas
que fueron en los barcos con dirección a Cuba para la compañía de Feijoó
Sotomayor y cartas que ellos enviaron a sus familiares, un material se guarda
en la biblioteca del Congreso bajo acceso restringido Es una historia real,
aunque quizá no demasiado conocida.
Recordamos las historias de éxito: la
figura del indiano que se fue arruinado y volvió millonario y luego desarrolló
alguna acción filantrópica en su pueblo de origen. Pero también hay que conocer
las historias de aquellos que se fueron engañados y que fueron tratados como
esclavos.
La propia autora de la novela nos recuerda
esta historia: “Desde los años 40 del siglo XIX en Cuba había una preocupación
muy grande porque había un desequilibrio en la población: la población blanca
era muy baja. Hacía unos años hubo una insurrección en Haití y se temía que
estallase una insurrección similar en Cuba y se perdiese el control. Había una
intención de llevar a colonos blancos. De hecho, Urbano Feijóo Sotomayor,
cuando escribe un artículo motivando por qué su empresa es interesante para el
gobierno español, uno de los motivos que da es: vamos a llevar trabajadores
blancos a la colonia y vamos a equilibrar la población porque empieza a ser
peligroso. De hecho, desde los años 40, los hacendados, por miedo, empiezan a
pedir que no se lleven más esclavos a Cuba y entonces el precio de los esclavos
africanos empieza a subir. Hay que tener en cuenta que los gallegos estaban
pasando una situación de necesidad por el hambre y el cólera. Urbano Feijóo de
Sotomayor se aprovecha de ello: crea una empresa y lleva trabajadores gallegos.
De esa forma equilibraba la población, se producía azúcar y, además, los
gallegos salían mucho más baratos de lo que salía en aquel momento un esclavo
africano”.
“Un diputado gallego, Ramón de la Sagra,
presentó ante las Cortes una solicitud para que se investigasen los contratos
bajo los que habían sido contratados estos gallegos que llevaron a Cuba, ya que
había constantes insurrecciones. Los gallegos no se avenían a trabajar en
condiciones de esclavitud. Entonces ese escándalo llega a la prensa española y
las Cortes deciden investigar. Además, a esta solicitud presentada por Ramón de
la Sagra se adjuntan una serie de cartas que han llegado a los familiares de los
que fueron esclavizados, en las que estos últimos piden ayuda. Después de meses
de discusión, se llega a la conclusión que estas personas firmaron un contrato
con unas condiciones abusivas porque, además, muchos de ellos no sabían leer y
esto no podía ser legal. La empresa de Urbano Feijóo Sotomayor se disuelve,
pero, como era diputado, no tuvo que responder pues tenía inmunidad. Así, los
gallegos quedan libres para volver a Galicia o seguir trabajando en Cuba como
trabajadores libres. Pero realmente no sabemos si volvieron o no. Y como esas
cartas se quedaron en el expediente en la Biblioteca del Congreso, no hemos
sabido nada más.
Pero el escándalo en su momento fue tan
grande que, mientras se estaba discutiendo este asunto en las Cortes, en la
prensa española se publicó una carta de solidaridad firmada por gallegos
emigrados en Nueva York”.
lunes, 13 de mayo de 2024
Notas después de leer “NO DIGAS NADA novela de JON ARRETXE.
El supervisor de
las cámaras de control de la llamada Pequeña África, la barriada de San
Francisco en Bilbao, repasa las imágenes del último mes; no hay rastro de
Touré, se ha esfumado. Aunque sus amigos tampoco conocen su paradero, saben que
se ha largado harto de humillaciones y de ser utilizado por la policía. En Bilbao se
quedan sus amigos del barrio: Osmán, el maliense con quien compartía piso,
Xihab, el camarero del Berebar, y Cristina amiga española y amante.
El burkinés ha
decidido desaparecer para refugiarse en un pueblo perdido del Pirineo navarro,
donde le espera Adama, antiguo compañero de fatigas desde que ambos fueran los
únicos supervivientes de la travesía en patera: “aquella fatídica travesía
por el Mediterráneo, aquella noche decisiva en la que íbamos treinta y un
africanos dentro de una patera”. Con un oficio más que añadir a su
variopinto curriculum, ahora Touré se dedica a cuidar ovejas, y lo único que
desea es una vida tranquila, pero su destino le persigue. Se verá envuelto en
una serie de vicisitudes estrambóticas, y estará a punto de perder la vida
intentando resolver un caso en el que nunca se hubiera querido involucrar y,
además, no puede resolver las dificultades a las que se enfrenta como
inmigrante sin papeles.
Jon Arretxe nos
ofrece un texto sobrio, no exento de ingenio y humor, con un estilo directo y
sin rodeos.
Jon Arretxe es el
creador de una serie protagonizada por este atípico detective-vidente de nombre Touré, un inmigrante burkinés sin
papeles llegado a España en patera, cuyo objetivo es sobrevivir. “No
digas nada” es el sexto título de la saga.
Los pocos habitantes que viven en Orbe, el pueblo
ficticio del Pirineo Navarro donde se ha refugiado Touré, no mantienen entre ellos una buena relación y
la policía no es bien recibida cuando tienen que personarse para
resolver algún caso. La única autoridad
que interviene en los litigios que tienen lugar entre los vecinos de este
pueblo es el alguacil, Isaac.
Esa mala relación que mantienen entre si los pocos vecinos de esta
pequeña población, origina una atmósfera
asfixiante en el ambiente y el lector dudará en adivinar quién fue el
causante del asesinato de un burro degollado con una motosierra.
Tomás, el dueño del burro asesinado, le encarga a Touré investigar quién
es el culpable del crimen. Y lo que en un principio parecía una investigación
tranquila y sin sobresaltos se volverá compleja, hasta el punto de que el
interés por todo lo que sucede en
torno a esta investigación que realiza Touré va de menos a más
El lector se encontrará con escenas propias de novela negra en los
últimos capítulos de la trama, y que tienen lugar en un establecimiento de
dudosa reputación, del que es cliente habitual el párroco de la
localidad.
martes, 7 de mayo de 2024
jueves, 2 de mayo de 2024
Notas de cuando leí “LO QUE LA MAREA ESCONDE” novela de MARÍA ORUÑA.
La presidenta del
Club de tenis de Santander, una poderosa señora de la ciudad aparece muerta en
el camarote de una goleta que con unos pocos invitados del mundo del
tenis surcaba el mar al anochecer. La teniente Valentina Redondo
deberá enfrentarse a este enigmático caso.
En “La
Giralda”, una goleta comprada y restaurada recientemente por el Real Club de
Tenis de Santander, está programada una cena homenaje a un famoso tenista
retirado que se encuentra en Santander asistiendo a unas jornadas sobre
deporte. A bordo se encuentran un pequeño grupo de invitados que tienen que ver
con el mundo del tenis, a los que se unirá la organizadora, la presidenta del
Real Club de Tenis de Santander, Judith Pombo, mujer influyente y empresaria de
éxito.
Judith
Pombo sube al barco y, después de discutir con su secretaria sobre la
organización del evento, se retira un momento a atender unos asuntos urgentes a
un camarote antes de la cena. No saldrá viva de allí. Después de que los
invitados escuchen un grito y llamen a la puerta sin obtener contestación
deciden abrir el camarote por la fuerza y la encuentran muerta ¿Qué ha podido
suceder? No hay signos de violencia, no hay armas y ella se encontraba sola.
Tan solo hay una pequeña mancha de sangre. No hay
a la vista señales de huida del hipotético asesino, y el ojo de buey del
camarote también está cerrado por dentro. Nadie ha abandonado la embarcación en
su travesía nocturna por la bahía ni ha podido colarse en la goleta desde el
agua.
Una
novela de misterio, en el que no hay nada a lo que agarrarse. La víctima se
encontraba aislada en un camarote en el que no ha podido entrar ni salir nadie,
no hay signos de lucha, ni arma homicida, ni ninguna pista con la que tirar del
hilo. Los invitados pueden tener motivos para desear su muerte, pero ninguno se
encontraba con ella en el momento de su muerte.
El autor del crimen
tiene que ser uno de los personajes que aparecen en la novela: la bibliotecaria, el de la silla de ruedas, la esposa
adinerada, el socio de honor del club, el capitán, la camarera, el jefe de
máquinas.
Nos vamos
a encontrar con una Valentina Redondo que no está en su mejor momento y podemos pensar que
nos hemos perdido algo de las anteriores entregas, pero pronto descubriremos
que esa situación es el resultado del desenlace de un caso que no solo le dejó
la cicatriz que puede verse en su cara, sino otra más profunda.
En la novela aparece Oliver, su comprensiva y cariñosa pareja de origen escocés y la forense y buena amiga Clara Múgica.
Una novela de intriga y misterio, de fácil lectura, bien planteada, un desafío a la inteligencia en un caso de «habitación cerrada», al estilo clásico de las novelas de misterio en un homenaje a Agatha Christie.